Descubre cuáles son los grupos sanguíneos más frecuentes

La mayoría habréis oído hablar de los grupos sanguíneos más comunes como el A, el B, el AB y el 0, con su respectivo Rh, que puede ser negativo o positivo.

En realidad, existen más de 300 grupos sanguíneos, aunque estos son los más habituales en Cataluña.

El grupo sanguíneo es hereditario. Por eso, las personas de una misma zona geográfica suelen tener los mismos grupos sanguíneos.

En el Banc de Sang hemos analizado la sangre de cerca de 84.000 personas ingresadas en hospitales. Hemos visto que los grupos más comunes son el A+ y el 0+, ya que lo tienen más de un 36% de la población.

A continuación, encontramos  el B+, presente en casi un 8% de la población, el A- en un 7%, el 0- en menos de un 7 y el AB+, que solo lo tienen el 3% de los catalanes.

Por último, los menos comunes son el B- (1%) y el  AB- (0,63%).

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No obstante, existen otros grupos muy poco frecuentes que solo tienen una de cada 10.000 personas.

Es fundamental tener localizados a donantes con estos grupos tan poco frecuentes para poder atender a todos los enfermos, también los que tienen grupos especiales.

Si una persona con un grupo sanguíneo poco común recibe sangre de un grupo incompatible, su cuerpo generará anticuerpos contra la sangre recibida, pues la detectará como un agente extraño. Si eso ocurriera, podría derivar en complicaciones graves para el paciente.

Algunos grupos como el U- o el Indian B- son más frecuentes entre personas originarias de África subsahariana e Irán, Pakistán y la India, respectivamente.

Si quieres saber más sobre estos grupos poco comunes, puedes consultar: donarsang.gencat.cat/es/puedo-donar/sangreexcepcional/

¿Qué determina nuestro grupo sanguíneo? 

La sangre está formada por cuatro componentes: los glóbulos rojos, los glóbulos blancos, las plaquetas y el plasma. Al rededor de los glóbulos rojos hay unas moléculas, que se conocen como antígenos, que determinan el grupo sanguíneo de una persona.

Así pues, el grupo sanguíneo de los padres determina el de los hijos. Por ejemplo, si los dos progenitores son del grupo A, es posible que el hijo sea A o 0, pero imposible que sea B o AB.