Pacientes

El proceso de transfusión

¿Qué se hace antes de iniciar una transfusión?

  • El enfermero establecerá el acceso venoso y verificará su correcto funcionamiento y permeabilidad. También tendrá que tener en cuenta la compatibilidad de la transfusión de componentes sanguíneos con otros tratamientos.
  • Dado que la transfusión puede durar varias horas, aconsejamos que el enfermo adopte la posición más confortable posible. Además, podrá comer y beber líquidos.
  • Es conveniente controlar la tensión arterial, el pulso y latemperatura antes de administrar cualquier componente sanguíneo.
  • Se pedirá al paciente que comunique al personal de enfermería cualquier incidencia observada en el transcurso de la transfusión.

¿Cuáles son las etapas de la transfusión?

A continuación, detallamos las etapas que sigue una transfusión:

  1. Identificar de forma inequívoca el receptor.
    Se pregunta al enfermo su nombre y apellidos. En los casos en que éste no pueda responder, como por ejemplo en enfermos anestesiados o inconscientes, la identificación se hará hablando con los familiares y consultando el historial clínico.    Identificar de forma inequívoca el receptor.
  2. Comprobar que el componente sanguíneo que nos disponemos a administrar es el preparado para aquel enfermo.
    Se revisa y comprueba que el receptor y la etiqueta del producto son correctos y coinciden. Actualmente, existen en el mercado diversos métodos (brazaletes y sistemas de registro con código de barras, entre otros) que ayudan a asegurar la correcta correspondencia entre el receptor y el producto asignado. Comprobar que el componente sanguíneo que nos disponemos a administrar es el preparado para aquel enfermo.
  3. En el caso de la transfusión de concentrados de hematíes, comprobar el grupo ABO.
    En este tipo de producto sanguíneo, es conveniente comprobar el grupo ABO, tanto del receptor como de la bolsa dispuesta para ser administrada en la propia cabecera de la cama del enfermo. En el caso de la transfusión de concentrados de hematíes, comprobar el grupo ABO.
  4. Una vez iniciada la transfusión, el enfermero controlará el enfermo durante unos minutos.
    El enfermero verificará que el enfermo no presenta ninguna reacción durante los primeros minutos de la transfusión.

¿A qué velocidad se tiene que realizar la transfusión?

Durante los primeros minutos, es necesario que la transfusión de cualquier componente sanguíneo se realice lentamente. Una vez se haya comprobado que la transfusión no provoca ninguna reacción, se ajustará la velocidad al ritmo recomendado para cada uno de los componentes.

De esta manera, para cada componente sanguíneo se sigue un ritmo diferente, que indicamos en la tabla adjunta. Hay que señalar, sin embargo, que estas recomendaciones son válidas siempre y cuando el receptor no presente problemas cardiacos ni tenga una edad avanzada. En estos casos, existe una mayor posibilidad de que su corazón sufra alteraciones; para evitarlo, se moderará el ritmo de transfusión. 

Componente sanguíneo Volumen medio Duración de transfusión Ritmo de transfusión
Hematíes 200-300 ml 60-120 min 30-60 gotas/minuto
Plasma (unitario o de aféresis) 200-600 ml 20-60 min 125-175 gotas/minuto.
Plaquetas (mezclas 5 u. / aféresis) 200-300 ml 20-30 min 125-225 gotas/minuto.
 

¿Por qué hay que firmar un consentimiento antes de la transfusión?

El enfermo receptor de una transfusión sanguínea tiene que estar informado de los riesgos que ésta puede comportar, así como de las alternativas terapéuticas existentes. Con esta información, el enfermo, o una persona responsable en caso de incapacidad del primero, firmará un documento llamado CONSENTIMIENTO INFORMADO PARA RECIBIR HEMODERIVADOS, que formará parte del historial clínico del enfermo. 

El "no consentimiento" a la transfusión de componentes sanguíneos puede generar situaciones problemáticas, ya que en una situación de urgencia vital, la ley obliga al médico a aplicar el tratamiento médico considerado adecuado aunque actúe en contra de la voluntad del enfermo. 

La jurisprudencia considera el derecho a la vida, la integridad física y la protección de la salud como derechos de prioridad absoluta. La vida de una persona siempre está por encima de la autonomía individual